Recientemente se nos ha confirmado por parte de la Gerencia Catastral el resultado de un encargo merecedor de publicar por las horas dedicadas y la dificultad del mismo.

El encargo consistía en averiguar las lindes de una finca. Sólo se poseía un plano sin referencias geográficas ni hitos que pudieran servir de arranque al estudio. La propiedad desconocía sus límites, lo único disponible eran sus referencias catastrales. La diferencia entre ambas no era superior al 10% admisible, pero presentaba sería dudas el replanteo en campo de las parcelas catastrales.

Se decidió investigar recurriendo a la Certificación descriptiva y gráfica Catastral aportadas por la Propiedad donde aparecen los datos de los linderos. Estos datos aportan la dirección fiscal de los titulares. La labor de investigación consistió por lo tanto en:

• Visita al domicilio titular lindero Certificación
• Documentación gráfica aportada por los titulares o visita a campo para la grabación de sus lindes.
• Firma del consentimiento para modificación de sus límites catastrales con la finca objeto de estudio.

Uno de los principales inconvenientes de este tipo de trabajos, es que el titular catastral puede haber transmitido la propiedad (venta, herencia, donación, etc.) y el nuevo propietario todavía no ha catastrado la propiedad. Empieza pues una investigación de titulares digna de novela policiaca.

En este encargo, la resolución ha sido bastante positiva. Sólo un lindero que aportó su plano, totalmente diferente a su representación catastral, presentó su oposición. Indescriptible. El resultado final puede observarse en las imágenes.